El simple hecho de entrar al bosque o disparar armas puede alterar los animales salvajes

Los corzos, jabalíes y zorros modifican sus patrones de alimentación, locomoción y descanso en cuanto la caza recreativa entra en actividad en su hábitat. Las especies nocturnas se ven especialmente afectadas, ya que su ritmo se ve alterado, deliberada o inadvertidamente, por la caza.

Los métodos modernos de caza, como los dispositivos de visión nocturna o las cámaras termográficas, aumentan la eficiencia de la caza , pero al mismo tiempo agravan el estrés de la fauna silvestre. a los animales , se reducen las distancias de huida y algunas especies evitan permanentemente ciertos hábitats.

Consecuencias para la población animal

A largo plazo, esto puede tener impactos en la reproducción, la supervivencia de los juveniles y la distribución poblacional. Algunas especies se retiran a zonas más remotas, mientras que otras permanecen sobreexpuestas. El equilibrio entre depredadores y presas también puede alterarse, afectando a toda la ecología y biodiversidad del bosque.

La planificación y regulación conscientes de la caza recreativa pueden contribuir a proteger el bienestar animal. Las perturbaciones repetidas causadas por la caza pueden provocar estrés crónico en los animales salvajes. Este estrés se manifiesta en patrones de movimiento alterados, mayor distancia de huida, mayor gasto energético y enfermedades.

Por ello, el IG Wild beim Wild exige:

  • Abolición de la caza como pasatiempo

La caza recreativa también puede alterar la estructura de los hábitats. Las perturbaciones repetidas hacen que los animales eviten ciertas zonas, lo que provoca la fragmentación del hábitat. Esto puede ser especialmente problemático para los animales jóvenes, ya que dependen de zonas no perturbadas para crecer.

La caza recreativa no solo carece de importancia cultural y económica, sino que también tiene graves consecuencias ecológicas. Quienes aman la naturaleza deben ser conscientes de que cualquier perturbación, incluso las aparentemente menores, tiene un impacto directo en la vida de los animales. Por lo tanto, una gestión equilibrada de la caza, como la del cantón de Ginebra, es crucial para preservar la biodiversidad y la tranquilidad natural de nuestros bosques.

Cazador aficionado de desastres naturales

Ningún otro país del mundo tiene una mayor proporción de especies amenazadas que Suiza. Más de un tercio de las especies de plantas, animales y hongos se consideran amenazadas. Suiza también ocupa el último lugar en Europa en cuanto a la reserva de áreas protegidas para la biodiversidad. Son estos círculos de cazadores aficionados, con sus presiones políticas, mediáticas y legislativas, los responsables de esto durante décadas. Son ellos quienes bloquean notoriamente las mejoras modernas y éticas en el bienestar animal y sabotean la protección seria de animales y especies. Los cazadores aficionados se oponen regularmente a la creación de más parques nacionales en Suiza porque no les preocupa la naturaleza, la biodiversidad, la conservación de especies ni el bienestar animal, sino más bien dedicarse a su perversa y sangrienta afición.